Cada vez veo más jóvenes creando cuentas en Tick Tok haciendo todo lo posible para que sus videos sean lo más vistos, no importando el “contenido”, sino solo buscando llamar la atención a toda costa.

En caso por el solo hecho de subir un video estoy a la vez “comunicando”, no señores. El mensaje debe llevar un contenido de valor que contribuya al beneficio del bien común, y esa es la función de todo comunicador. Es como preparar un ceviche sin que le falte los condimentos de: informar, educar y entretener. 

Así es, no es fácil, por eso la carrera de Ciencias de la Comunicación dura en promedio cinco años. Me he visto con alumnos del décimo ciclo de la universidad que no saben levantar la noticia por el hecho más importante, y menos hacer un titular atractivo con caracteres resumidos para su publicación.

Las personas piensan que al subir a las plataformas digitales una historia (video) logrando un buen número de visitas son todo un éxito. Y no es así, porque, por ejemplo, Tick Tock muestra una numeración que no es del todo real, solo son uno o dos segundos de vistas de los videos, pero no la totalidad del tiempo de los mismos (escrolear). Y te convencerías de ello por el número de comentarios o me gusta que logras en tus publicaciones. Existen herramientas de análisis para redes sociales que ayudan mucho a disipar dudas.

Recuerda, no se trata solo de subir fotos bonitas o videos entretenidos, sino de construir comunidades, conectar con tu audiencia transformando tus ideas en algo verdaderamente valioso que tenga un impacto en el mercado, manteniendo siempre la escucha activa.

Un narrador de “contenidos” nato cuenta tendencias que enganchan, y es recomendable dominar el manejo de “multiplataformas”.

Al final, podríamos estar hablando de un marketing de contenidos, donde a través del contenido de valor de lo que estamos comunicando, nos convertimos en tendencia fidelizando a nuestra audiencia del segmento específico de nicho del mercado al cual nos dirigimos.