En el asentamiento humano Señor de los Milagros, en el distrito de Víctor Larco, a pocos metros de la playa de Buenos Aires, hay más de 20 familias que no solo deben protegerse contra el nuevo coronavirus, sino también con todo lo que provoca vivir junto a un criadero de cerdos y aves que no reúnen las garantías para funcionar, demandan.

“Esto ya nos viene afectando hace más de seis años, por más que nosotros le hemos dicho al señor (propietario del terreno) que por favor aquí no es criadero, aquí hay viviendas, y más que todo (sic) afecta a los niños, hay bebés afectados por los olores fétidos, incluso a la hora de almorzar no se puede”, denunció la señora Magaly Cumpa.

Buscamos la versión del demandante, y aunque tocamos la puerta de manera reiterada, nadie nos atendió. Luego los vecinos aseguraron que el dueño del criadero no habitaba ahí. Es por eso, que consideran que solo busca su beneficio sin ver el grave daño que les causa. Y lo que más le llama la atención es la indiferencia de su autoridad local, a quien le piden atienda su demanda en tiempos de pandemia.

“Solo vienen a dar de comer a sus animales y luego se van, solamente es la chanchería y alado nosotros vivimos con las criaturas. La municipalidad siempre viene a ver esto y no hay ninguna solución, ya lo hemos hecho documentado y no hay posibilidades de que hagan algo al respecto”, añadió la señora Celia López, quien llegó hace ocho años a este asentamiento humano.

De momento el alcalde del distrito de Víctor Larco, César Juárez Castillo, no se ha pronunciado sobre esta demanda. Los vecinos del asentamiento humano Señor de los Milagros urgen una respuesta pues consideran que la salud es una prioridad.