Desde malestares hasta la muerte: estos son riesgos de los parásitos en nuestras mascotas

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Nuestras mascotas son mucho más que simples animales de compañía. El amor que llegamos a sentir por nuestros compañeros es tal, que podemos considerarlos verdaderos integrantes de la familia. ¿Cómo no encariñarnos si nos reciben con tanta felicidad al llegar a casa?

Sin embargo, a pesar de que sintamos un gran afecto, nuestras mascotas requieren cuidados especiales. Por ejemplo, una infestación de parásitos podría ocasionarles desde un malestar común hasta la muerte. Por el contrario, si cuidas su salud, podrás disfrutar de su compañía por mucho tiempo.

Enemigos silenciosos                                              

Algunas de las infecciones más frecuentes en nuestras mascotas son causadas por parásitos. Se trata de seres vivos que viven a costa de otros seres superiores (también llamados hospedadores), alimentándose de partes de su organismo o de sustancias alimenticias ingeridas por éstos.

Los parásitos pueden ser externos, visibles como las pulgas o garrapatas, pero también pueden ser internos, como los gusanos y larvas. En el caso de estos últimos, aunque no se pueden observar, constituyen un gran riesgo para nuestros compañeros e incluso para nosotros, pues pueden migrar de organismo.

¿Cómo se contagia mi mascota de parásitos?

Un cachorro puede infestarse al nacer, ya que son vulnerables. En el caso de los adultos, existen varios factores, pero principalmente, el contagio se produce por la exposición de mascota a mascota. La mascota pueda ingerir los huevos de parásito al olfatear o lamer el suelo con restos de excremento, al escarbar en la basura, o al jugar con artículos que hayan estado en contacto con superficies contaminadas.

Los parásitos externos como las pulgas también son muy prolíficos. ¿Sabías que una sola pulga hembra puede llegar a convertirse en 1000 nuevas pulgas en tan solo 21 días? A pesar de que limpiemos nuestro entorno, nuestra mascota puede adquirirlas fácilmente en un paseo al parque. 

¿Cómo afectan los parásitos a mi mascota?

Al igual que las maneras de contagio, los síntomas y consecuencias de una infestación por parásitos son muy variados. Especies como los gusanos redondos pueden causar molestias digestivas a nuestros engreídos, así como tos y neumonía. 

Existen otros gusanos que provocan diarreas con sangre y anemia severa, y si no son eliminados a tiempo, pueden ocasionar la muerte. Las pulgas y garrapatas también pueden causar anemia y reacciones alérgicas, además, pueden transmitir un sinfín de enfermedades.

¿Cómo tratar a mi mascota?

Es importante que nuestros compañeros sean atendidos por profesionales. Después de examinarlos y aplicarles pruebas, ellos determinarán si son afectados por parásitos.

Si se trata de invasores internos, generalmente se aplica tratamientos durante todo el año, cada tres meses, a través de comprimidos, pipetas o gel. En el caso de parásitos externos, existen sprays, pipetas, collares y pastillas masticables.



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