Por Wilder Acosta

La Libertad es una de las regiones que en las elecciones del 2016 ha manifestado ser mayoritariamente fujimorista con más de 432 mil votos a Keiko Fujimori, seguido del Apra con más de 123 mil. La izquierda con Frente Amplio obtuvo más de 91 mil votos. Entonces, La Libertad es minoritariamente izquierdista.

¿Cómo encajará su postura ideológica en esta región si en 2018 solo obtuvo votos, como Perú Libertario, en Julcán, Santiago de Chuco y en Trujillo apenas obtuvo 3 mil votos. Las demás provincias no apoyaron a su partido político?

Justamente, porque el triunfo es un proceso que se va trabajando día a día y se va gestando nuevos adeptos, ¿no? Posiblemente en este proceso electoral Perú Libre dé una sorpresa en cuanto a tener mayor votación que la anterior y así paulatinamente. Nosotros sabemos que la macronorte es un terreno donde las últimas décadas ha estado primando partidos de la derecha, como el Apra, el fujimorismo y últimamente el acuñismo; sin embargo, en el sur y en el centro del Perú lo que se cuestiona eso del norte es que no hay una presencia de la izquierda sólida o un crecimiento lento pero sostenido. Y a eso responde nuestra presencia, a reforzar las bases, a presentar a los candidatos, y establecer una plataforma y una propuesta bastante clara para el proceso legislativo que se avecina.

¿Puede una persona como usted, sentenciada por un delito de corrupción y que fue suspendido del cargo de gobernador justamente por ello, liderar con solvencia moral una agrupación política en el marco de la lucha contra la corrupción?

Por supuesto, porque yo no he sido sentenciado por corrupción, yo he sido sentenciado por la corrupción que impera en el Poder Judicial, porque a mí se me sentencia por hacer cumplir la ley, por hacer cumplir una conciliación extrajudicial del Gobierno Regional (de Junín) representado por su procurador público y una empresa.

¿En qué se diferencia la postura ideológica de Perú Libre con la del Frente Amplio, Juntos por el Perú y Nuevo Perú?

Sí, por ejemplo, de que no estamos cerca a las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) que nosotros consideramos organismos de estos gobiernos dentro de nuestro gobierno, sobre todo batuteados por USAID que son, en este caso, enviados por Estados Unidos y, lógicamente no se puede hacer un cambio de la mano de quienes nos oprimen.

Esa es una diferencia bastante clara con Perú Libre, que no tiene contacto y apego con estas organizaciones extranjeras.

¿Siente que es el responsable de la renuncia de exparlamentarios, como Marisa Glave, Indira Huilca, Humberto Morales al movimiento Nuevo Perú luego de la frustrada alianza?

Yo creo que si tengo algún grado de responsabilidad, en eso debe ser agradecida por Verónika Mendoza porque gracias a esto se ha podido despercudir de los oportunistas que la rodeaban y quienes son los culpables de que no hayan inscrito un partido político teniendo los 20 congresistas la capacidad logística para hacerlo, la capacidad de representatividad que dicen tener y la capacidad de influencia política.

Y también otro tema que nosotros también hemos cuestionado es que mucho de esos grupos que han entrado con Frente Amplio han ido a resolver problemas de grupo, problemas personales, caso Indira Huilca que debió, en este caso, emitir una ley a favor de construcción civil, a quienes debe su voto, y no el tema del LGTBI. Que no decimos que no es importante, pero no es prioritario para la izquierda.

¿Cuándo será prioridad para la izquierda?

Cuando se resuelva el problema económico y social que tiene el país. Por ejemplo, 2 millones 700 mil analfabetos en la era del conocimiento. Por ejemplo, 1 millón 240 niños sometidos a explotación. Por ejemplo, una mortalidad infantil que llega a 26 en la zona rural o al 45% que azota de las niñas en la zona rural de la sierra. Esas son prioridades para nosotros…

En todo caso, ¿cuál será la principal agenda de Perú Libre en el próximo parlamento si consigue representación alguna?

La agenda que tenemos, ya que se trata de un parlamento bastante corto, radica en cuatro puntos: primer punto es lograr una ley para que proceda a hacer un referéndum consultándole al pueblo peruano si está de acuerdo o no con una Asamblea Constituyente en miras de una nueva constitución política.

El segundo punto es eliminar la inmunidad, pero no solamente parlamentaria, sino inmunidad a todo nivel, esto es a fiscales supremos, a jueces supremos, a ministros de Estado, presidente de la república, y también al parlamentario.

El tercer punto es discutir o no la bicameralidad, pero sí estamos a favor de que el parlamento deba ser ampliado para que tenga una mejor representatividad en el sentido de que el Perú tiene el parlamento más pequeño del mundo: 130 personas dirigente el destino de 33 millones y eso debe ampliarse.

¿Qué le esperaría a La Libertad con parlamentarios de Perú Libre, sinceramente?

Bastante, porque es una nueva voz, un nuevo enfoque de hacer política, luchar por la descentralización fundamentalmente. No es posible que Lima esté reteniendo el 70% del presupuesto cuando viven 10 millones de habitantes y los 23 millones que vivimos adentro no estén dando el 30%. 

En La Libertad existe un proyecto de envergadura que se llama Chavimochic, ¿está de acuerdo que continúe con Odebrecht, como propone el gobernador regional?

Yo respeto la posición del gobernador (Manuel) Llempén, pero no estoy de acuerdo. Es una empresa que ya se ha demostrado que ha sido la principal corruptora del Estado. Es una empresa que se beneficia de los contratos ley y es una empresa que ha mentido porque ha dicho que solo había corrompido en cinco proyectos y, a la luz de los hechos, ha corrompido a más de 15 proyectos, donde está el tema Kuntur o Kuntur Wasi, está el tema de la Interoceánica, o el tema de Olmos mismo, que no están en el convenio de colaboración inicialmente.